Siempre tuve el deseo
de obtener el título universitario de Doctor en Ciencias Económicas, y cuando
empecé a trabajar en la universidad de mi país, se me intensificó aun más este
deseo cuando veía a mi alrededor un grupo de doctores que se distinguían por su
forma de hacer las cosas y el valor que se le daba en la sociedad.
Aun con esta ilusión
quería conseguir una universidad que me ayudara a conseguir mi objetivo pero
que tampoco dejaría mis quehaceres cotidianos. Un día me metí en internet a
buscar esta universidad y una amiga me recomendó la AIU, que gracias a Dios,
dicha universidad me aceptó como parte de su alumnado. Ante esta situación, me encontré con un reto, y es que era la primera
vez que estudiaría desde mi casa y solo haciendo uso de la computadora, sin
clases obligatorias, ni horarios fijos, con un tutor académico que te atiende amablemente
todas las dudas y con un apoyo incondicional a cualquier hora del día.
Una vez que comencé, me di cuenta que era algo muy
positivo, porque consideré atractivos los tiempos, que al ser en línea, era una flexibilidad y podía combinarlo
perfectamente con mi empleo, también esta flexibilidad me daba la oportunidad
de hacer mis trabajos y estudios en un lugar más cómodo y que yo ya estuviera
familiarizado. Pero al mismo tiempo, estudiar en AIU en línea, me proporcionó
una situación estratégica donde tenia a los maestros, tutor académico,
compañeros y toda una biblioteca centralizados en una misma plataforma que hace
más cómodo desenvolverse en el entorno universitario.
Es por esta razón que recomiendo los estudios en línea, y
si es en la AIU mejor, porque es allí donde me han brindado todo el apoyo
profesional que necesitaba, me han aportado valores como la disciplina en los
estudios, y me han convertido en un investigador sobre lo que realmente importa
para la humanidad
¡¡Gracias AIU!! Y que sigas promoviendo la cultura
investigadora a toda la humanidad. De esta manera creo que conseguiremos un
mundo más cómodo
Pergentino
Esangui Ondó